Tiempo de juego:
469 minutos
De nuevo uno se pregunta que pasa con esta industria cuando pruebas juegos indie creados por 4 gatos y hacen mejor las cosas que los estudios con enormes financiaciones por detrás…
Resist no deja de ser un juego indie en todos sus apartados (gráficos, sonido, música, historia, duración), pero jugablemente le pasa por encima a juegos de más renombre.
Y nuevamente es absurdamente ilógico que juegos así pasen tan desapercibidos dentro de los propios usuarios de la VR, parece que ni el boca a boca consigue hacer llegar estos juegos a la gente (ya ni hablemos de que le hayan hecho algún análisis en alguna web de videojuegos...)
Resist es, a fecha de hoy, la mejor jugabilidad de "Spiderman" recreada en un videojuego. Gracias a la VR, ha conseguido destronar hasta al propio Marvel Spiderman de Insomniac. Pues aquí no es que parezcamos Spiderman, es que si nos pusiesen una Skin del superhéroe y nos cambiasen las pistolas y ganchos por telarañas es que seriamos directamente Spiderman.
La sensación de moverte entre edificios, el control aéreo que tenemos y la forma de impulsarnos por el mundo es TAN TAN ORGÁNICA y está TAN TAN bien hecha, que a pesar de ser un juego indie en el resto de apartados ya solo por el sistema de locomoción del juego ya merece la pena jugarse este juego.
Cuando nos agarramos a un edificio y saltamos delante de nosotros vemos una "guía" de la inercia que lleva nuestro personaje, una especie de "asistencia visual" para saber qué grado de fuerza llevamos. Con un simple giro de muñeca variaremos la dirección del personaje con una precisión brutal.
Obviamente, tendremos que tener un poco de práctica, pero al menos en mi caso a los pocos minutos de juego ya tenía una precisión digna del propio Spiderman.
El juego tiene sus limitaciones propias de un desarrollo indie... no hay personajes físicos (solo interactuaremos mediante radio), solo hay un escenario que cambia en franja horaria para darle algo más de variedad, y es bastante simple en desarrollo de misiones/actividades. Pero si haces todas las actividades del mapa y la historia principal, para unas buenas 7 horas sí que te da, sin que se termine por hacer cansina la poca variedad de situaciones.
El juego tiene un botón de ralentizar el tiempo con el que podemos apuntar y disparar a los enemigos en plenas piruetas aéreas, y una especie de jetpack para facilitar algunas maniobras, aunque yo personalmente no le di mucho uso.
También el juego está PLAGADO de opciones, tanto de locomoción como del juego en sí, por ejemplo el juego viene con auto apuntado activado, la cual puedes desactivar (menos mal), además está subtitulado al español.
Gráficamente, pues la ciudad se siente algo vacía, pero la sensación de altura está muy conseguida, una persona con vértigo va a experimentar esto más intensamente, pues podremos subir verdaderamente alto.
La historia principal, pues es la típica historia simple de un juego indie. Obviamente, aquí prima la jugabilidad sobre todo lo demás, habría estado mejor este juego con los estándares de calidad del Marvel Spiderman, pero si ni siquiera Sony tiene las ganas de hacer algo así, pues tampoco se lo podemos exigir a un estudio que no conoce ni San Pedro.
En definitiva, un imprescindible de la VR que sin ser una obra maestra, merece jugarse.
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