Reseñas de Painkiller: Black Edition

GOOOOOOOOOOD juegazo de ciber

Painkiller es, sin duda, uno de esos boomer shooters que marcaron mi infancia y que, hasta el día de hoy, sigue siendo uno de los mejores shooters que he tenido el placer de jugar. Desde que lo vi a mi viejo jugandolo allá por los mediados de los 00's sabía que iba a ser una joyita. La trama, aunque simple, tiene ese encanto que te atrapa desde el principio: estás en el purgatorio, y tu misión es básicamente aniquilar a todo lo que se mueva. Punto. Estás vos sólo contra el mundo. Obviamente hay más historia, pero sería spoiler. Pero lo que realmente hace que Painkiller brille es su gameplay. Es una delicia. Tiene una variedad de armas que son tan creativas como satisfactorias de usar. Desde el ventilador de metal, hasta un lanzaestacas de madera. La movilidad es otro punto fuerte: te sentís súper ágil, rápido y siempre en control, lo que es esencial en un juego donde el ritmo es frenético y no te da un respiro. Y no puedo olvidar mencionar la ambientación, que es simplemente espectacular. El juego tiene ese tono gótico, oscuro y tétrico que te sumerge por completo en su mundo. Cada nivel, cada escenario, está diseñado con tanto detalle que te hace sentir que realmente estás en el infierno (o algo parecido). Sin embargo, no todo es perfecto en el universo de Painkiller. Lamentablemente, esta joya es la excepción y no la regla dentro de su propia franquicia. Las secuelas que llegaron después no lograron capturar ni una pizca de la magia del original. Son repetitivos, carecen de la chispa que hizo especial al primero y, en general, se sienten como intentos fallidos de replicar algo que ya era perfecto tal como estaba. Por eso, para mí, Painkiller es y siempre va a ser un juego único, una experiencia que no necesita de continuaciones para mí. En resumen, Painkiller es un 10/10. No solo el juego base, sino también su expansión, que complementa y enriquece aún más la experiencia. Súper recomendado, tanto para los nostálgicos como para los nuevos jugadores que quieran probar algo fuera de lo común.

Es un juego jugable y rejugable. Tiene variadas modalidades y puedes estar horas y horas jugando.