Reseñas de Hatch

Recuerda un poco a Rock Bottom (2013) o Getting Over It with Bennett Foddy (2017) en cuanto al tema (subir una torre como forma de sobrepasar la depresión, el tedio, la frustración, la derrota y otras barreras que te presenta la vida) y la forma de escalar dicha torre (caer para saltar más alto en Rock y martillo como impulsor en Foddy). Hatch se parece pero tiene su propio lenguaje. El tema de superación está ahí, pero con un cariz más religioso y poético. Nos acompaña una música con cantos que aumenta conforme llegamos a la cúspide, en las zonas más altas la torre está compuesta de una arquitectura que recuerda a templos, partimos de un huevo como símbolo de nacimiento, nos encontramos por el camino otras personas que fracasan o intentan subir como nosotros, etc. Las mecánicas también son diferentes. Aqui lo que prima es el ángulo de las paredes por las que podemos escalar. Si está por debajo de los 90º grados podemos subirlo, si es igual o menor nos caemos, símbolo de la necesidad de aprovechar en nuestra vida lo que nos motiva a mejorar Llegados a un punto lo unico que divisa el jugador es planos inclinados, los cuales incluso pueden engañar a la vista. Acaba siendo un juego de observación y perspectiva. Esto entronca con el tema, pues la forma del salto da una sensación de etereidad Pablosky y el hecho de que no muramos en la caída y que haya bastantes checkpoints nos da a entender que lo importante no es el reto en sí, sino el viaje de instrospección hacia lo más alto, hacia el paraíso.

Somos un humanoide azulado que acaba de nacer y se le pone delante la tarea titánica de escalar una extraña y gigantesca estructura con formas irregulares, tuberías por aquí y allá, estructuras flotantes... mientras evitamos la mirada del sol semicircular (por así decirlo, el enemigo de este juego). Una vez llegamos a suficiente altura, el sol no nos hará daño, puesto que las nubes cubrirán su mirada. Es ahí cuando empieza la segunda parte de la escalada, ya que a partir de aquí habrá menos estructuras escalables y más saltos precisos. Parece que trata de expresar la necesidad de ir más allá. De superar cualquier problema u obstáculo que tengamos para alcanzar nuestro zenit, y así estar tranquilos. Sabiendo de dónde venimos y hasta dónde hemos llegado. Cuanto más avanzas en la estructura, pasas de ir viendo gente (los NPCs azules) sufriendo, algunos aplastados contra el suelo de la caída, colgándose de la pared necesitando ayuda; a ver una "casa" modesta, gente en una hoguera disfrutando del momento... Hasta que alcanzas la cima y, por ello, el paraíso. Durante la escalada, como he dicho, posiblemente te encuentres con algún NPC. Aunque no parece que tengas interacción con ellos de ningún tipo, pese a que alguna vez parezca lo contrario. También tiene algunas estructuras más llamativas que sirven de guardado temporal, como son lo más característico unas farolas. Desconozco si al llegar a caer del todo se resetea el guardado temporal al punto que has llegado, o no. Porque las veces que he caído y no veía suelo literalmente he cerrado el juego xD. Y encima la pantalla de cargar partida es la misma que tiene al empezar el juego, así que la primera vez pensaba que no se me guardó nada. Sustos que dan gusto jajaj. No tengo acrofobia (fobia a las alturas) ni claustrofobia (fobia a los espacios cerrados) pero, aun así, varias veces me he sentido agobiado. No me quiero imaginar los que sí que tengan estas fobias. Así que si consideras que no lo vas a pasar bien, mejor no lo compres. Pero oye, si quieres probar, adelante. Al fin y al cabo es un videojuego, no la vida real. Y está barato. El juego agradecería que hubiese tenido algunas opciones para cambiar la sincronización vertical, entre otras. Pero en general, al precio que está, es más que decente.

Juego simple pero muy entretenido y que engancha. La premisa es muy básica: tienes que trepar por una extraña estructura evitando que te de la luz del Sol (o lo que sea ese extraño semicirculo celestial) hasta llegar a la cima, sólo puedes trepar cuando la superficie esté inclinada, aunque sea mínimamente. Hay un par de momentos en que te puedes quedar atascado en alguna zona (recordad que puedes saltar y rodear una esquina de la que "vuelas") pero la dificultad es muy asequible porque además hay ciertos checkpoints (una especie de farolas) que hacen que al morir (o si sales del juego y vuelves en otro momento) reaparezcas ahí. Total, entre dos y tres horas de relajado entretenimiento a precio de saldo, a mi me ha gustado, aunque también es verdad que el mes que viene probablemente ya ni me acuerde de el. Una muy buena opción para echar una tarde lluviosa sin demasiadas complicaciones.